Las hamburguesas suelen calificarse dentro de lo que denominamos en gastronomía «fastfood» o comida rápida. Es cierto que hay un tipo de hamburguesa globalizada que no es nada saludable, pero esto no quiere decir que en nuestra casa no podamos hacer la mejor hamburguesa del mundo. Quédate a leer este post y verás como conseguirlo.
El origen de las recetas de hamburguesas caseras es dudoso, aunque parecen provenir de los trabajadores portuarios de la ciudad de Hamburgo en Alemania. Solían hacerse una especie de sandwhich con las sobras de los asados y con el tiempo este bocadillo improvisado, fue tomando forma circular y incorporando ingredientes como la lechuga, la cebolla, los pepinillos, etc. De ahí a América, donde se comienzan a hacer con carne picada y pronto se convierte en todo un icono del fast food.
Como puedes ver, un plato de aprovechamiento termina siendo una de las comidas más consumidas a nivel mundial. Esta práctica de utilizar los restos de comida nos puede dar muchas alegrías en la cocina, si no, mira qué ricura podemos hacer también con las tortillas de maíz o de trigo cuando nos sobra carne: Tacos de carne asada con vinagreta andaluza
En este post tu eliges si hacer las hamburguesas tradicionales o ir más allá. Te voy a dar una receta que son dos en una. Así tú decides cuál quieres preparar. Puedes hacer la de carne, pero yo te animo a que pruebes también la Oliburguer, una deliciosa hamburguesa vegetariana que te va a sorprender.
Vamos con los ingredientes necesarios para las recetas de hamburguesas caseras (4 o 5 unidades):
- 500 grs de verduras: calabacín, zanahoria, boniato, patata, berenjena o 500 grs de carne picada de la que prefieras (la proporción de las verduras puede variar, pero la mitad al menos debe ser patata y boniato que aportan más consistencia)
- 150 grs de aceitunas picadas
- 1 Aguacate maduro
- 2 cucharadas de tahini (pasta de sésamo)
- 50 grs de pan rallado
- 1 huevo
- 1 cucharada de salsa soja
- Una cucharada de comino en polvo
- Pimienta negra molida al gusto
Vamos ahora con el modo de preparación:
- Si has elegido la opción vegetariana, debes cortar la verdura a cuadraditos, menos la zanahoria que la vamos a rallar y ponerla en una sartén con una cucharada de aceite suave a pochar con un poquito de sal, la pimienta negra y el comino. En el caso de la carne, como ya está picada, no tenemos que cortar nada, añadimos las especias y a sofreír.
- La verdura debe quedar «al dente» aunque tierna, no debemos pasarnos de punto para que tenga un poco de cuerpo. En el caso de la carne, solo debemos saltearla un par de minutos para quitar el aspecto a carne cruda. Puede que en este paso tanto la verdura como la carne suelten líquido que debemos ir eliminando.
- Sacar nuestro sofrito y ponerlo en un bol o fuente. A partir de aquí, todo el proceso es igual para los dos tipos de hamburguesas.
- Agregar las aceitunas picadas. Yo le suelo poner verdes y negras, pero tú eliges cuál usar.
- Añadir la yema de huevo, el tahini, el aguacate chafado, la salsa de soja y el pan rallado. Mezclar con las manos bien limpias o con una paleta de cocina. Debemos obtener una masa homogénea y más o menos compacta. Si notas que está demasiado húmeda, añade un poquito de pan rallado más. Si estuviera seca, un poquito de agua.
- Formar las hamburguesas haciendo una bola primero y aplastándola luego con cuidado de no romperla. Poner en una bandeja y dejarlas reposar en el frigorífico al menos un par de horas.
- Pasar por una sartén engrasada a fuego medio- alto hasta dorarlas un poco. Servir en pan de burguer o con guarnición.