La mayonesa o mahonesa es una de las salsas de elaboración fría más famosas del mundo. Creo que estarás de acuerdo en que la gastronomía no sería lo mismo sin ella; no existiría la Ensaladilla rusa entre otros platos y no podríamos usarla como complemento para montones de pecadillos culinarios. Esta salsa acompaña perfectamente a suculentos sandwiches, deliciosos canapés, hamburguesas extremas con todo incluido, patatas fritas y un sinfín de platos más. Por ello, no queremos que nadie se quede sin esta cremosa salsa y hoy vamos a aprender cómo preparar una mayonesa sin huevo o lactonesa.
Además de por el tema de la intolerancia, hay otros motivos por los que prescindir del huevo en la elaboración de la mayonesa y el más importante es el calor. De todos es sabido que el uso del huevo crudo puede causar intoxicaciones, sobre todo en época estival. Igualmente, si preparamos comida para un día en el campo, aunque no haga mucha calor, es recomendable usar lactonesa en lugar de mayonesa porque no podemos mantener los alimentos a una temperatura estable como en casa. Así que lo más recomendable es aprender cómo hacer una mayonesa sin huevo y evitar correr riesgos en algo tan serio como la alimentación.
Para hacer un buen tarro de nuestra lactonesa vamos a necesitar:
- 125 ml de leche entera a temperatura ambiente. Si eres intolerante a la lactosa puedes usar sin lactosa.
- 200 ml de aceite de oliva suave
- Unas gotas de zumo de limón
- Sal
Vamos a enchufar la batidora…
- Poner la leche con la sal y el chorrito de zumo de limón en el vaso de la batidora.
- Comenzar a batir sin mover la batidora del fondo del vaso durante unos segundos.
- Añadir el aceite muy poco a poco y de manera constante. Mantener la batidora al fondo del vaso hasta que notes que empieza a espesar.
- Comenzar a mover la batidora de arriba a abajo suavemente para ayudar a la emulsión mientras añades el resto del aceite.
- Guardar en el frigorífico en un tarro cerrado.
Notas
Ya tienes tu mayonesa sin huevo lista para consumir y te aguantará al menos 5 días en la nevera para que la uses como más te apetezca. Como has visto en la lista de ingredientes, puedes hacerla libre de lactosa por lo que tendremos un producto indicado para intolerantes a la lactosa, al huevo y también al gluten, ya que tampoco lleva.
Si se te corta al hacerla, solo tienes que poner un poco de la mayonesa cortada en un recipiente y volver a batir añadiendo aceite poco a poco; de este modo podemos hacer que emulsione para que su textura sea la deseada.
Espero que pruebes esta variante de la mayonesa tradicional y te dejo otra idea de salsa para acompañar tus platos: Cómo hacer el mojo picón para chuparse los dedos