Pocos platos son tan reconfortantes en los días de invierno como las sopas. Consiguen templar nuestro organismo en los dias de frío, y calmar nuestro estómago, ayudándonos a llegar al segundo plato con el hambre más aplacada. De este modo evitamos comer en exceso.
La sopa de verduras y pollo que voy a enseñarte a preparar hoy, es una de mis opciones favoritas dentro de los miles de tipos de sopa que podemos preparar. Al fin y al cabo sopa es todo plato en el que cocemos algunos ingredientes en líquido utilizando especias, aceite o plantas aromáticas para enriquecer nuestro caldo. Hay tantas combinaciones posibles como alimentos existen.
Además de estar riquísima, esta sopa de verdura y pollo está considerada como “la penicilina de la abuela”, ya que se ha demostrado científicamente que tiene una acción directa sobre los resfriados. Yo, además de las verduras y el pollo, le añado jengibre fresco y cúrcuma, que también tienen numerosos beneficios para el organismo. Te dejo un enlace donde explican muy bien esto que te cuento: ¿El caldo de pollo combate el resfriado?
Además de aplacar el hambre, las sopas son magníficas para hidratar el organismo. Hay personas a las que les cuesta mucho beber agua. Es muy importante tomar líquidos en cualquiera de sus formas. Si no bebes mucha agua, debes consumir sopas, caldos, zumos y cualquier alimento que aporte hidratación a tu organismo.
Y si como te he comentado antes, tienes un resfriado, precisamente una de las recomendaciones de los médicos es tomar mucho líquido, así que tomar esta sopa de verduras y pollo te ayudará a combatirlo.
En cuanto a la dificultad de esta receta, te diría que es más fácil que freír un huevo sin romper la yema.
Vamos a recopilar los ingredientes para preparar una olla de sopa para 4 raciones:
- 250 grs de carne de pollo
- 2 zanahorias
- Un nabo
- Una cebolla
- 4 ramas de apio verde
- 1 patata
- 2 puerros
- 250 grs de calabaza
- 2 calabacines
- Un trozo de jengibre fresco
- Una cucharada de cúrcuma
- Media cucharada de pimentón de la vera dulce
- Pimienta negra molida
- Perejil o cilantro fresco
¡Vámonos para los fogones!
- Lavar el pollo y trocear su carne en trozos más bien pequeños. Puedes usar pechuga o cualquier parte carnosa que no tenga hueso.
- Pelar, lavar y trocear todas las verduras en trozos medianos como en la foto.
- Poner en una olla 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra a calentar. Echar el pollo salpimentado y marear un par de minutos.
- A continuación echar el pimentón y la cúrcuma. Sofreír un minuto moviendo el pollo con una cuchara de madera.
- Añadir las verduras troceadas y remover para que se mezclen con el pollo y las especias un minuto aproximadamente.
- Cubrir con agua y dejar al fuego a temperatura media.
- Cuando lleve media hora al fuego, añadir el jengibre rallado. El equivalente a dos cucharadas. También añadiremos el perejil o cilantro y un poco de sal al gusto. Añadir más agua si fuera necesario para que la verdura y el pollo siempre queden cubiertos de líquido.
- Debemos cocinar la sopa durante 1 hora. Luego serviremos bien calentita con algo más de hierbas frescas, si nos apetece.
Notas
Suelo hacer una olla de unas 4 o 5 raciones cada vez que hago esta sopa de verduras y pollo. Ten en cuenta que lleva bastantes ingredientes y que no es muy rápida de preparar, así que como dura una semana en el frigorífico, la tomo intermitentemente durante varios días para beneficiarme de sus propiedades.
No te preocupes si quieres improvisar y no tienes todas las verduras o condimentos que yo he usado en mi receta, lo imprescindible es el pollo, cebolla, zanahoria, nabo, patata, perejil, sal y pimienta. Con esto ya puedes preparar tu penicilina de la abuela, así que, ¿a qué esperas?
Para no perder el hilo de recetas de verduras, te dejo con esta curiosa sopa que puedes tomar caliente y también fría: Crema de remolacha (Borsch)