Siempre he asociado la palabra paté a un producto de origen animal. De pequeña me gustaba el paté de atún de una famosa marca. Con el tiempo he descubierto otros tipos de paté y estoy encantada porque cuando los preparas en casa son mucho más saludables y resultan un perfecto entrante.
Este paté de berenjenas es uno de los patés vegetales más ricos que se pueden preparar. La berenjena tiene una carne que se presta mucho a este tipo de recetas cremosas y una vez que aprendas a hacerlo, se convertirá en uno de tus aperitivos favoritos. Para mí, junto al hummus se ha convertido en plato imprescindible cuando reúno a amigos en casa para dippear y tomar un vinito.
Hay muchas maneras de prepararlo, pero yo me he inspirado en una receta de origen libanés llamada baba ganush. Tiene una textura irresistible y un toque cítrico que la hacen única. De todos modos también le he dado mi toque personal, como verás más abajo.

Al igual que en Oriente Medio, en Grecia tienen su paté de berenjenas. Es una receta muy parecida al baba ganoush, si no que en lugar de añadir tahini, le añaden yogur griego. Su nombre es tan raro que es casi imposible de recordar: Melitzanosalata. A mí me gustan las dos versiones, así que cuando tengo tahini la preparo con este ingrediente y otras veces lo hago a la griega.
Otro ingrediente que añado solo a veces es el pimentón. Según me apetezca o no, pero no es un ingrediente imprescindible. Además, en esta ocasión le he añadido un poco de crudités para darle un poco de emoción a la hora de masticar y crear ese punto crunchy tan apetecible.
Vamos a reunir los ingredientes para nuestro pate de berenjenas:
- Dos berenjenas
- Un poco de pimiento verde y rojo
- 2 cucharadas de zumo de limón
- 2 cucharadas de tahini
- Un diente de ajo
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de comino en polvo
- Un poco de pimienta negra molida
- Perejil fresco
- Una cucharadita de sal
El modo de preparación es muy sencillo:
- Primero, cortar las berenjenas por la mitad transversalmente y poner con la piel hacia arriba en una sartén con unas gotas de aceite para que no se peguen. Tapar y dejar a fuego medio-bajo. Cada 5 minutos las volteamos hasta que estén tiernas.
- Cortar el perejil y los trozos de pimiento de dos colores en trocitos pequeños y reservar.
- Poner en la batidora los demás ingredientes menos el aceite de oliva en la batidora y batir hasta que quede una crema homogénea.
- Finalmente, sacar de la batidora a un bol y mezclar con las crudités con perejil. Hacer un hueco en el centro y añadir las dos cucharadas de aceite de oliva. Adornar con frutos secos, granada, hierbas aromáticas…