La mermelada casera de fresas con chía es una saludable alternativa a las mermeladas tradicionales. Su origen se encuentra en la combinación de fresas frescas y semillas de chía, una mezcla que ha ganado popularidad en los últimos años debido a sus beneficios nutricionales y su facil preparación.
Una de las mayores ventajas de esta opción es que no necesita tanta cocción y este hecho no solo conserva mejor los nutrientes de las frutas, sino que también permite disfrutar de una mermelada fresca y natural en poco tiempo. Practicamente es como comer la fruta fresca, pero con una textura muy especial. Es un placer poder disfrutar de dulces caseros saludables, ya que lo que encontramos en los supermercados, a excepción de algunas marcas, están llenos de azúcares refinados. Por si te interesa, también tengo una receta de nocilla casera que está deliciosa y es súper sana: Crema de cacao con aguacate
En cuanto a la chía, son semillas y suponen un excelente complemento para una dieta equilibrada, ayudando a nuestro organismo a regular nuestro azúcar en sangre, aportando vitaminas, antioxidantes y proteínas. Por si fuera poco, es uno de los alimentos que más ácidos grasos omega-3 contiene. ¿Alguien da más?
Vamos a ver los ingredientes que necesitamos para nuestra receta de mermelada casera de fresas con chía:
- 500 grs de fresas
- 80 grs de chía
- 30 cl de zumo de limón
- 80 cl de agua
- 4 cucharadas de endulzante al gusto
Aquí tienes el modo de preparación:
- Poner la chía en un recipiente y cubrirla de agua. Reserva.
- Enjuaga y corta a trocitos tus fresas.
- Poner una sartén a fuego medio y echar las fresas junto con 150 ml de agua.
- Dejar cocer un poco mientras removemos con una cuchara de palo, a la vez que vamos aplastando también los trozos.
- Cuando veas que se ha formado una especie de melaza, retira del fuego y añade el zumo de limón, la chía hidratada y el endulzante.
- Remover con movimientos envolventes para mezclar todos los ingredientes.
- Verter en tarros y dejar enfriar.