Quiero empezar con una regla de oro: la pasta siempre se cocina en agua con sal. No importa si es pasta fresca o seca, la sal le da sabor a la pasta y ayuda a que no se pegue. Además, siempre hay que cocer la pasta en una olla grande con suficiente agua. Si la olla es muy pequeña, la pasta no tendrá suficiente espacio para moverse y terminará pegándose. La proporción aconsejada es de 1 litro por cada 100 grs de pasta, ahí es nada.
El siguiente factor a tener en cuenta en esta guía definitiva: cómo cocer la pasta perfecta es el tiempo de cocción. No hay nada peor que la pasta pasada o dura. La mayoría de las veces, la pasta se cocina en unos 10-12 minutos, pero siempre es mejor probarla para asegurarse de que está “al dente”, es decir, cocida, pero firme al morder.
Además de aplicar estos dos consejos tan importantes, hay otras cosas que debes saber a la hora de cocer la pasta:
- Agregar aceite al agua de cocción no evitará que la pasta se pegue: Es un mito. Lo que realmente ayuda a evitar que la pasta se pegue es removerla con frecuencia durante la cocción, al menos un par de veces o tres en esos 10 o 12 minutos que tarda en hacerse.
- La pasta fresca no se cocina más rápido que la pasta seca: La pasta fresca y la pasta seca requieren el mismo tiempo de cocción. Si te interesa preparar tu propia pasta no dejes de ver este post: Recetas con pasta fresca
Los pasos exactos a seguir para cocer la pasta perfecta son los siguientes:
- Poner la olla a calentar con el agua suficiente para el tipo y cantidad de pasta. Como dijimos más arriba, la proporción más idónea es de 1 litro de agua por cada 100 grs de pasta.
- Para ahorrar energía y para aligerar el proceso, tapamos la olla y esto hará que el agua llegue a punto de ebullición antes.
- Una vez que el agua comience a hervir, añadimos la sal y removemos para que se disuelva.
- Cuando el agua hierva de nuevo es el momento de añadir la pasta y remover con una cuchara de madera para que no se pegue al fondo. Una vez que hierva de nuevo, es el momento a partir del que debemos contar el tiempo de cocción, no antes. Sigue siempre las instrucciones del fabricante y si es pasta casera, ve probándola a partir de los 9 minutos para comprobar su dureza.
- Reservar un poco del agua de cocción de la pasta antes de escurrirla. Esa agua tiene almidón y puede ser usada para hacer las salsas más cremosas y ligadas. Agregar un poco de esa agua al final de la cocción es un truco que siempre funciona para lograr la textura perfecta en nuestras salsas.
Bueno, espero que esta guía definitiva sobre cómo cocer la pasta perfecta te haya sido útil y te anime a cocinar más pasta en casa. Recuerda siempre divertirte en la cocina y experimentar con diferentes tipos de pasta y salsas. ¡Que viva la pasta!